El Partido Verde aplazó la votación sobre su posible escisión interna tras una reunión en la que no se logró un consenso. La senadora Angélica Lozano y un grupo de representantes solicitaron la división por diferencias con la bancada, especialmente por su apoyo al gobierno de Gustavo Petro. La decisión se pospuso para el 17 de marzo con el fin de escuchar a todos los sectores y buscar un acuerdo.
Sin embargo, la votación para aplazar la decisión generó controversia, con algunos congresistas que inicialmente pidieron la escisión mostrando su intención de votar en contra. El presidente de la Cámara, Jaime Raúl Salamanca, defendió la decisión de aplazar la votación para lograr un consenso y aseguró que se realizará de forma pública. Por otro lado, el senador Iván Name anunció que demandará la asamblea por considerarla ilegítima.
Mientras tanto, los representantes que buscan la separación evalúan una posible alianza con el Nuevo Liberalismo y Compromiso y Dignidad para las elecciones legislativas del próximo año. La senadora Lozano afirmó que buscan «jugar duro» en las presidenciales para ganarle al sucesor de Petro.
El senador León Freddy Muñoz, quien se mantiene en el partido, instó a los que se queden a organizarse y destacó la importancia de evitar el regreso de la extrema derecha al país. Salamanca, por su parte, subrayó la necesidad de que la decisión final sobre la escisión y el rumbo del partido se tome considerando las bases y no solo los intereses de los congresistas.
