
Embajador Armando Benedetti protagoniza nuevo y vergonzoso escándalo
Un nuevo escándalo rodea a Armando Benedetti, embajador de Colombia ante la FAO en Roma. Las autoridades de Madrid, España, confirmaron que acudieron a una residencia privada en la ciudad tras denuncias de violencia de género por parte de Benedetti hacia su esposa, Adelina Guerrero Cobo.
La Policía española solicitó la presencia de Benedetti en la residencia. Sin embargo, el funcionario habría evadido la acción de las autoridades apelando a su inmunidad diplomática.
Aunque Benedetti negó los hechos, las publicaciones recientes de su esposa han generado intriga en las redes sociales. En una foto, Guerrero describió a una persona con problemas mentales, lo que algunos usuarios relacionaron con la posible situación de su esposo.
“Estas personas suelen mostrar una incapacidad para sentir remordimientos por sus acciones, incluso cuando dichas acciones causan daño a sí mismos o a otros. Los sociópatas pueden exhibir una habilidad extraordinaria para ocultar sus verdaderas intenciones y manipular a los demás con fines personales”, decía la publicación.
Una semana después del incidente en Madrid, Adelina publicó un mensaje reflexivo sobre la salud mental, lo que levantó más especulaciones entre los usuarios de redes sociales.
“Entre más poder, más responsabilidad y ejemplo. Tener una credencial o alto cargo no te da el derecho de humillar y utilizar la violencia. Esta es la generación de los poderosos de cristal, del ‘usted no sabe quién soy yo’. Si representas a un país, hazlo con decoro y dignidad”, escribió el 16 de julio.
Por su parte, la Cancillería manifestó que se ha abierto una investigación para determinar lo sucedido y tomar medidas al respecto.
“La Cancillería ha activado los mecanismos oficiales para conocer lo sucedido e iniciar el protocolo correspondiente”, puntualizó un portavoz.
Se confirmó que el expediente del caso está en manos de la oficina de control interno disciplinario y se añadió que “cuando tengamos resultados actuaremos conforme a la ley”.