Uribe sorprende con elogios al proceso de paz y a De la Calle

Manifiesta que ve un “cambio” tras comparecencia de De la Calle en el Congreso.

En medio del debate de control político sobre el proceso de paz que se cumplió ayer durante más de ocho horas en la plenaria del Senado, el expresidente Álvaro Uribe, sin dejar de hacer duras críticas a la mesa, dijo que «hay un cambio en las conversaciones que da unos asomos de tranquilidad».

Se refirió el senador del Centro Democrático a lo relatado en el recinto por el jefe negociador Humberto de la Calle sobre la entrega de armas por parte de los rebeldes: «creo que hay un cambio de discurso entre lo escuchado esta noche y lo que hemos escuchado muchas veces; ya se está hablando con más claridad de la entrega de armas y se ha dejado la palabra dejación».

No obstante, Uribe advirtió que le siguen preocupando los temas de una posible impunidad y de las prácticas de narcotráfico por parte del grupo subversivo.

Antes, el alto comisionado para la paz, Sergio Jaramillo, expuso ante la plenaria del Senado «los cuatro puntos críticos que determinarán si llegamos a un acuerdo o no» con las Farc en La Habana y enumeró el asunto de la seguridad, el cese al fuego y la dejación de armas, el tema de la justicia y la implementación de lo acordado.

Explicó Jaramillo que el punto de la seguridad se refiere a «las políticas de seguridad que se diseñen en las regiones, porque la paz debe significar más seguridad, y también seguridad para las Farc, para que no se repita lo de los años ochentas».

El segundo punto crítico es el cese al fuego definitivo y dejación de armas y el tercero «es el tema de justicia, que se refiere a cómo crear un modelo de seguridad jurídica a todos los que participaron en el conflicto, incluyendo a las fuerzas estatales y a terceros civiles».

Y el cuarto punto, el de la implementación, incluye «cómo vamos a hacerlo y qué garantías vamos a dar de que todo esto que se acordó se va a cumplir, de qué recursos vamos a disponer, cómo vamos a construir una visión conjunta en los territorios».

Por su parte, el jefe negociador del Gobierno, Humberto de la Calle, señaló ante la cámara alta que «hay una oportunidad real, no es irreversible, pero depende fundamentalmente de la ciudadanía, porque a las Farc les hemos dicho que en el tema de justicia negocian ellos y los colombianos, más allá de las cortes internacionales, hay un deseo de justicia, un sentimiento de que no hay lugar a amnistías, y sí creemos que es conveniente a la luz del Marco Jurídico para la paz usar penas parte de las cuales tienen que cumplirse con privación de la libertad».